El 5 de diciembre es el Día Internacional del Voluntariado. Una jornada para conmemorar el compromiso de las personas voluntarias de todo el mundo. Este año, con motivo de esta fecha, entrevistamos a Angélica Vásquez, voluntaria del Club Social Salut Mental Gràcia. Una mujer entusiasta e implicada, con una sonrisa que abraza y una energía que hace bailar.
A través de ella queremos rendir un modesto homenaje a todas las personas voluntarias de Grup ATRA. Personas que, como Angélica, regalan a otras personas una parte de su tiempo, de forma generosa y desinteresada. Agentes de cambio, que hacen de nuestra sociedad un lugar mejor, más justo y más humano. Gracias por vuestra sensibilidad y solidaridad, ¡gracias para ser una parte esencial de nuestra entidad!
¿Cómo conociste a Grup ATRA?
Soy estudiante de la Universitat Autònoma de Barcelona y el servicio de ocupación de la universidad tiene en su base de datos varios colectivos y organizaciones que se dedican al trabajo social y de salud mental y bienestar en Barcelona. Allí encontré a Grup ATRA y me interesó la opción de voluntariado.
¿En qué recurso has participado como voluntaria? ¿Qué tarea has desarrollado?
Participé como coordinadora/monitora de la actividad de baile durante cuatro meses. Lo llevé a cabo en el Club Social Salut Mental Gràcia, cada jueves por la tarde durante una hora. La idea era ofrecer a los usuarios del club una actividad alegre y didáctica llena de baile y música. Iniciábamos con un calentamiento, seguía con la práctica de una breve coreografía, a veces algo de improvisación,… La mayoría de las veces yo traía preparada una selección musical pero en ocasiones también elegíamos alguna canción entre todos durante la actividad.
¿Cuál fue tu motivación para unirte a hacer voluntariado en nuestra entidad?
Soy estudiante internacional del máster de Danza Movimiento Terapia, de manera que quería ampliar mis conocimientos en el campo, así como entender mejor el sistema de acción social y voluntariado en Catalunya.
¿Qué experiencia te ha marcado especialmente durante tu periodo como voluntaria?
El contacto y el aprendizaje que tienes con los usuarios. ¡Los usuarios son lo mejor! Aprendí de cada uno de ellos todos los días de mi voluntariado, confirmé mi vocación de servicio y mi enfoque social.
¿Cuáles crees que son los beneficios y los aprendizajes de hacer voluntariado?
Los aprendizajes dependen mucho de lo que busques a nivel social o personal con el voluntariado. En mi caso aprendí muchísimo de manejo de grupo y liderazgo, mejoré mi observación y retroalimentación, a la vez que esta experiencia me preparó mejor de lo pensado para mis prácticas clínicas del máster. Más allá de las habilidades y herramientas que fortaleces haciendo voluntariado, creo que tu mente y tu corazón se abren más al mundo y a la gente, y eso no tiene precio.
¿A qué retos te enfrentaste como voluntaria?
Mi primer día estaba muy nerviosa y temía no cumplir las expectativas, pero el equipo del club siempre estuvo muy atento a acompañarme y a resolver mis dudas de una forma muy cálida y colaborativa.
¿Qué le dirías a alguien que está pensado en convertirse en voluntario o voluntaria pero no se atreve a dar el paso?
Hacer voluntariado es una experiencia muy enriquecedora, nos recuerda y nos conecta con lo que nos hace humanos, la salud y el bienestar se construyen en comunidad y en colaboración. Es la mejor oportunidad para aprender y mejorar todas tus herramientas, a la vez que conoces a muchas personas interesantes y de paso también lo pasas muy bien. Estoy muy agradecida a Grup ATRA por esta oportunidad, os deseo todo lo mejor con esta labor tan necesaria y tan preciosa que lleváis a cabo.